El Banco Central aprobó la licencia de la nueva entidad que tendrá sólo 40 empleados.
Comenzará a operar, tras cumplir con los requisitos de seguridad y de capital. Competirá con el resto de las entidades financieras del mercado local.
Contará con productos y servicios bancarios, líneas de crédito, depósitos e inversiones, sobre el segmento de clientes jóvenes, acostumbrados a los canales electrónicos.
El nuevo banco pertenece a los empresarios Eduardo Eurnekian de Aeropuertos 2000 y Guillermo Francos, ex presidente del Banco Provincia.
Iniciará su operación con u$s10 millones de capital, apuntando a incrementar ese monto a u$s100 millones en depósitos en un año con una base de 50 mil clientes.
No tendrá sucursales, sí con una buena plataforma para operar y un centro de atención telefónica u online.
Para comenzar, podría necesitar de otros bancos: el movimiento de dinero se podría concretar con transferencias desde otras entidades o por cajeros automáticos.
La iniciativa es parte de la transformación digital de todo el sector bancario a nivel global. Reduce el número de sucursales y oficinas de atención al público. Al tiempo que amplía y agiliza los canales electrónicos para realizar operaciones de efectivo.